Por el Vn. Peinado
A Lagunas del Volcán Peinado (5.841 m.s.n.m.)
Primer día de travesía.
La idea inicial era empezar por Corona del Inca y terminar descansando en las termas de Fiambalá, pero Leandro Uy yu yuy tuvo la muy apropiada idea de empezar al revés, es decir ir directo Fiambalá y a la vez de descargarnos las tensiones citadinas, ir realizando una casi na-tural adaptación a la altura para todo lo que vendría.
La ruta fue planificada como siempre (después de la exhaustiva investigación acostumbrada) por Horacio HORA4WD, y consistía salir de Baires directo a Fiambalá (escala en Córdoba), un día allí de termas y relax. De allí salir hacia el norte hacia el paso San Francisco por la RN60 desviando allí para tomar la ruta del volcán Peinado y terminar el Antofagasta de la Sierra (ADLS). Al otro día ir al volcán Galán. Al otro día por el campo de piedra pómez, Cor-dillera de San Buenaventura, Las Papas y llegada a Fiambalá. Al día siguiente dar la vuelta por el norte al monte Pissis hasta llegar a dormir en el obrador Vialmani. Desde allí al otro día Corona del Inca y dormir en Vinchina. Despues el regreso vía paseos por Catamarca y escala en Córdoba.
Ya en la Hostería Municipal de Fiambalá les cuento quienes éramos. En principio íbamos a ser mas los participantes pero notables coincidencias de situaciones laborales y familiares obligaron a varios META a bajarse de la travesía. En primer plano el tractor amarillo Nissan X-Terra (Raúl GCI 4X4 y flía), Suzuki Vitara (el Tano Fernando y flía quienes tenían previsto hacer solo una parte del viaje), Toyota Hilux (Horacio HORA4WD y flía) y Toyota SW4 (Leandro Uy yu yuy y flía).
Espectaculares las termas como siempre. No menos espectacular el asado que nos comimos.
Saliendo por la ruta 60 hacia el paso San Francisco.
Pasamos por el puesto de control Las Grutas donde conversamos con los gendarmes.
En el paso San Francisco los de Vialidad expendían combustible. La carga era “a la criolla”
pero cumpliendo el viejo adagio de “tanque siempre lleno”, cerramos los ojos y decidimos
preservar el combustible “bueno” y con anticongelante ya colocado para más adelante.
Desde aquí ya no bajaríamos de los 4.600 msnm.
Unos km más adelante salimos del asfalto con rumbo norte hacia el camino del Volcán Peinado. Leandro adelante.
Y al rato nomás apareció el Peinado. Un cono perfecto que de este lado sur se muestra con nieve.
Daríamos la vuelta después hacia la otra cara sin nieve por la presencia del sol.
Ajustando los bidones.t
Se empiezan a ver los increíbles campos de lava por los cuales andaremos buena parte del día.
Los uy yu yuy
Detras la laguna Amarga.
Los GCI
Detras el Vn. Condor, se aprecia la colada de lava que llega hasta la laguna.
Otra foto mas de la Hondonada del Cóndor. Majestuoso paisaje.
Al fondo Laguna Amarga (su color se debe a gran presencia de arsénico) y el
Vn Cóndor (6.434 m.s.n.m.)
Cornisa con pedregales flojos y lava abajo.
Increíble mezcla de colores (incluido el del tractor amarillo).
De nuevo la cornisa de lajas flojas con lava abajo.
Andando entre la lava.
El camino era muy exigente para la cubiertas.
La lava es sumamente abrasiva, muy dura y está fija en el camino
por lo tanto al no moverse la lava ni deslizarse la rueda al pisarla, la misma se “raspa”.
HORA4WD y flia. desde otra vista de la laguna Amarga.
Panorámica de la Laguna Amarga desde otro ángulo.
Espectacular visión como desde un balcón.
Abajo la laguna y la cordillera detrás desde los 4.800 msnm.
El mal de altura se empezaría a manifestarse en algunos participantes.
Y empezaron las encajadas. Por momentos aparecían tramos de 50 a 100 mts de arenales muy blandos y profundos.
La Vitara lo sintió de inmediato debido al poco despeje. Aquí le hicimos un caminito de lajas y salió bien.
Y llegó la encajada difícil.
Aquí la arena estaba definitivamente blanday la vitarita no podía pasar.
Facundo y Fernando sacando arena de debajo de la chata.
GCI la eslingo hacia atrás un par de veces para que tomara envión pero no había caso.
Lea uy yu yuy se vino para tratar de sacarla tirándola marcha atrás, pero tampoco salía pues
no podía tironear por culpa de la curva y de un pozo que había más atrás.
Observen la ladera que baja abruptamente detrás de Leandro.
Resulta que Leandro se volvió para dar vuelta su chata y tratar de sacarla tirando hacia delante, pero cuando venía de regreso marcha atrás el tren trasero se metió en un pozo que estaba al borde de la ladera (allí se había encajado originalmente Hora 4WD) y al inclinarse mucho la Toyo directamente la “tiró para abajo” al grito de ¡¡ME CAÍ!!
Yo me preocupé (por no decir aterroricé…) no solo por el momento de la bajado sino pen-sando como la sacaría de allí, pero Leandro y Horacio deliberando muy tranquilos desde abajo nos decían que sacáramos de una vez a la Vitara para “no sumar los tiempos” jaja!! (frase típica de Uy yu yuy).
Finalmente luego de varios intentos desde varias posiciones logró salir bajando la cubiertas a 12 lbs. Es increíble como cambia el vehículo libra por libra que uno baja (o sube) de la presión de la gomas.
La frase “tirar la chata” que nació allí ya verán como después se convertiría en el lei motiv de la travesía.
Volcan Peinado (5.841 m.s.n.m.)
Mientras se trabaja en sacar los vehículos, los metachicos se entretenian armando pistas en la arena volcanica.
Ellos ajenos a los contratiempos disfrutaban de un magnifico día.
Unos metros atras la Vitara salió finalmente y esta vez verdaderamente “a pila”.
A pila de METAS que empujaron mientras se levantaba en el aire patinando sobre la arena.
Romi4WD y su hijo.
Se empezó a sentir la altura en especial después del tremendo esfuerzo de sacar las chatas. Horacio “dándose aires”.
Habiendo salido de la zona difícil, al pie del Peinado todos a reinflar las cubiertas para seguir sobre la lava. Como siempre resalto la importancia de llevar todo lo necesario. Aparte de combustible adicional, anticongelante en todos lados y segundo auxilio llevábamos tres compresores (además de un matafuego con gas para inflar las ruedas, que ahora me sale no se cual es…), palas, high lift, eslingas, todo tipo de herramientas, un botellón de oxígeno por chata, et
c. Adentro por supuesto comida, abrigos, anafe, agua, comida de todo tipo en heladera eléctrica, trafo de 220 v, bolsas de dormir, frazadas, linternas, botiquín, videos y juegos para los chicos, etc. Planificamos como para tener todo lo necesario encima si por alguna razón hubiese que pasar la noche en la montaña.
Camino a la laguna del Peinado una de las zonas más alucinantes de las tantas por donde anduvimos.
Es una superficie gris plateado de arena volcánica de ese color en la superficie, pero debajo hay arena común, en partes piedra pómez (como las protuberancias que surgen de ese mar plateado) y también bancos de polvo blanco de piedra caliza donde Leandro casi se queda encajado.
El cono invertido que se ve a la derecha era sorprendente por la forma y los colores tan definidos.
Otra parte de un lugar verdaderamente increíble.
Ya se veía la laguna. Buscando por donde pasar.
El barro era blando y profundo sin mucho espacio para eslingar una encajada,
así es que hubo que darle rosca y casi subirse arriba para no quedarse.
Yuyo & Barro
En un momento de la huella la laguna casi se juntaba con los “morros” de lava y solo quedaba
un espacio reducido con yuyos y barro. Hubo que buscar como pasar.
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¡¡Llegamos a la laguna!! Momento de reflexión.
El sol baja y nosotros seguimos andando.
Dejando el Peinado empezamos a ver el agua sobre el Salar de Antofalla.
Los HORA4WD esperándonos y sacando fotos.
Bajando hacia el Salar de Antofalla.
Surcos de agua que desembocan en el salar. Se iba la luz y aún faltaba mucho para ADLS.
Finalmente se hizo de noche. Hubo cornisa nocturna (aquí Fernando revisando una cubierta que se desinflaba).
En otro momento tomamos por error una desviación del camino que era más largo, volviendo al original solo para regresar después a ese más largo al darnos cuenta que era más seguro para transitarlo de noche.
Más adelante en un momento íbamos al borde del salar y de repente se acabó la huella contra la montaña. Resulta que la huella estaba sobre el mismo salar unos 50 mts hacia adentro del mismo y la descubrimos de casualidad a linterna en la negrura de la noche.
Transitar por el salar de Antofalla solo acompañados por la luna y las estrellas, es un regosijo para el alma. Disfrutar de esas pequeñas cocas hacen grandes esos momentos. Hasta los mas pequeños estaban subyugados por el paisaje que no veíamos, pero sentiamos la grandeza de la puna.
Después llegamos a la zona conocida como Barreal, que es un salar donde los vehículos levantaban un talco color rojizo que al no haber viento no se disipaba entonces debíamos separarnos pero a la vez no tanto como para seguir viendo las luces y poder seguir la huella del que iba adelante. Imaginen eso cansados, más la incertidumbre, etc.
Llegamos finalmente a ADLS como a las dos de la mañana. Un día de paisajes y aventuras con todas la letras.
Cuando HORA4WD comentó este camino algunos conocedores no lo recomendaron por incierto, muy largo y complicado. Creo que saliendo un poco más temprano y sin la pérdida de casi dos horas y media en las encajadas se puede hacer sin problemas pues realmente vale la pena.
FIN DEL CAMINO DEL VOLCAN PEINADO.
PRONTO LES CUENTO LA LLEGADA AL VOLCÁN GALÁN.
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